Sí, hoy te vi, y como siempre: la risa, la música, la voz y
tu pelo, la risa, la música, la voz, la risa, la música, la risa,
risa, tu risa.....
Ya no me quejo, no como antes cuando tu presencia
lograba que gritara furiosa, aunque muy por mis adentros (donde nadie pasaba,
ni tú que tenias tantos y tantos privilegios).
Irónicamente, me enfurecías pero no dejaba que anduvieras muy
lejos, no por laderas distintas a las mías. Aumentabas mi histeria, dominabas
mi descontrol.
Pero hoy no, hoy te tenía tan cerca que era incomodo, que casi
podía escuchar la música proveniente de tus oídos, tan cerca que podía notar
que al hablar nuestros labios estaban rozando, te aborrecí tanto.
Pero hoy no, dejé que te acercaras, que invadieras ese espacio que
se supone sólo era para mi deleite personal.
Hoy, te tuve así de cerca...
Te aprovechaste, te dejé entrar y abusaste, no dije nada, te dejé tomar de mí, te dejé manipularme, me quedé como espectadora mientras te encargabas
de besar todo mi rostro: impulsivo, violento, loco y frenético, y a pesar de
todo no me lastimaste y fuiste el encargado de hacerme sentir frágil.
Por: KJV
muy bueno....
ResponderEliminarhey, me gusto ...
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